BOCANADAS PARPADEANTES
«No hay tal cosa como la globalización, sólo existe la virtualización. Lo que se globaliza efectivamente a través de la instantaneidad es el tiempo.1»
Paul Virilio
“Vapeadores baratos y bebidas energéticas” brilla el neón púrpura en un lado de la carretera por el que pasamos con el coche. Hago una foto sobre la marcha con el smartphone que se indexa automáticamente en la nube. De inmediato, pasa a pertenecer a los miles de millones de imágenes que componen el flujo de información que se archiva dentro del cable de fibra óptica. En algún lugar de una central eléctrica climatizada, los mundos en línea se copian y pegan formando una constelación de imágenes. Mientras el coche sube a toda velocidad por la avenida de la colina, nos encontramos con los carteles luminosos de los “Juice Bars”, que se amontonan con gimnasios y otros tipos de lugares de ocio. Las imágenes que capto de ellos circulan dentro de los “círculos viciosos del capitalismo audiovisual”,parafraseando a Hito Steyerl en su ensayo seminal “In Defense of the Poor Image”2. En este texto, Steyerl analiza el papel de la tecnología digital en la difusión de las imágenes y sitúa al Jpeg como el bastardo de una imagen original, que ya no es la cosa real al navegar por los algoritmos, los anuncios pop-up y las redes sociales, produciendo en última instancia una suerte de realidad. Mientras miro a través del cristal de la ventana, me pregunto hasta qué punto controlamos la representación digital del mundo que nos rodea, incluidos nosotros mismos.
La práctica de Viktoria Binschtok considera la interconexión de la imagen en un mundo cada vez más globalizado y tecnológico, al mismo tiempo que reflexiona sobre el estatus de la fotografía tal y como se ha visto alterada por la introducción de los smartphones en nuestros canales de comunicación. La obra Statue/Fish pertenece a la serie Cluster3 (2014-2017), en la que la artista ha introducido sus propias fotografías en algoritmos informáticos que buscan imágenes que estén relacionadas visualmente. A continuación, hace una selección de estos emparejamientos y pone en escena ventanas especulativas al mundo, combinando sus propias fotografías y las de los algoritmos. Llevando este proceso más allá,Binschtok ha estado desarrollando la serie Networked Images (2017-actualidad) en la que conecta los diferentes mundos de imágenes (el suyo y el encontrado) superponiéndolos físicamente. Como afirma la artista, “con este método, puedo representar el concepto abstracto de la migración de imágenes (image flow). Al volver a escenificar los jpegs encontrados, transfiero estos datos fugaces al espacio físico, congelándolos en el tiempo”.